miércoles, 28 de enero de 2009

Los turcos en la educación alemana: Mehmet Daimagüler y la abuelita alemana que lo ayudó a entrar al Gymnasium pese a la oposición de su profesora


A propósito de lo observado acertadamente por Roberto (opinión en el foro de ), les recomiendo este post: Mehmet Daimagüler desde Yale

Pongo de relieve, en esta ocasión, sobre todo (como decía el editorial de un diario alemán ayer: para integrarse, no sólo hay que querer integrarse, sino que hay que querer integrar y hasta hace poco, los niños turcos no eran deseados en la universidad):

"Él mismo cuenta que, en su calle, vivía una buena señora alemana ya mayor, que él y sus hermanos llamaban Oma, esto es, abuela. Oma Philippine hacía con ellos las tareas (deberes, en algunos países) y los ayudaba con el estudio. Su ayuda y apoyo les permitió a él y a sus hermanos entrar al Gymnasium y hacer el bachillerato. Cuando ella murió -cuenta Mehmet- los Daimagüler estaban sentados en la primera fila de la iglesia, porque ella pertenecía a la familia.

"En Alemania, la educación primaria acaba en el cuerto año y los escolares continúan en tres tipos de colegio. El único que te habilita para entrar a la universidad es el Gymnasium. La profesora de cuerto año le dijo a los padres de Mehmet 'un niño turco no va al Gymnasium'. La profesora es quien da la recomendación para tal o cual forma de colegio, de manera que tú dependes completamente de ella. Las posibilidades de influencia de los padres sobre su decisión son bastantes limitadas. Pese a ello, los padres con la ayuda de 'la Oma' lograron enviar a Mehmet al Gymnasium, al final del cual logró un 1 en alemán, un 1 es la nota máxima".


1 comentario:

Martín Palma Melena dijo...

Hola, Marta

Ya me habían dicho que la educación alemana era media totalitaria. Y ahora entiendo por qué: decidir el destino de un niño sólo por las cualidades que demuestra a los 9 o 10 años es un abuso (y más cuando a esa edad los niños no saben qué quieren de la vida y son algo flojos. Y eso no significa que carezcan de inteligencia).

Aunque, según no cuentas, en este caso habría que agregar el tema de la discriminación: la profesora funge como la primera barrera del sistema para impedir que un niño turco en el futuro vaya a ocupar un puesto importante en la sociedad.

Si eso no es totalitarismo, no sé qué más podría serlo...