Queridos amigos, Clausius ya está en Bayreuth, desde Jena, ¿ciudad de la luz?, de manera que, lamentablemente y mientras no convenza a mi amiga X de que escriba desde Leipzig -lo que podría hacer sin ningún problema, aunque ella se queja, con razón, de las dificultades que tiene para conectarse (acaba de pasar más o menos diez meses sin teléfono y sin internet y eso que vive en la ciudad misma)- nos quedaremos sin hispanoparlante que escriba desde el El Este de Alemania
Desde este blog, le deseamos lo mejor a nuestro querido amigo Clausius, ¡ahora en Bayreuth!
La dignidad humana es intangible, artículo 1° de la Ley fundamental.
La violencia hecha contra un solo ser humano es violencia contra todos, Benedicto 16 (28.1.09)
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