Parece que hubiésemos vuelto -túnel del tiempo- a la década del '60 ó '70. En efecto, nuevamente
Hans-Christian Ströbele plantea la legalización del
cannabis
En la foto de
Wikipedia, ven al diputado de Los Verdes (en septiembre del 2006), esta vez, con un girasol;) Agradecemos la foto a
Stepan
Rainer Thomasius psiquiatra, experto en adicción. Trabaja en el Deutsches Zentrum für Suchtfragen des Kindes- und Jugendalters = Centro alemán para cuestiones relacionadas con la adicción de ninos y jóvenes, de la Clínica universitaria de Hamburg-Eppendorfen, en Hamburgo, donde es director médico (Ärztlicher Leiter).
Esta manana fue entrevistado en DLF y me parece interesante escuchar su opinión. Ya que, en el caso de las drogas y su eventual "legalización", estamos no sólo ante un caso en que apliquemos un criterio económico (que si le legalizan, baja su precio, lo que pongo en duda), sino que estamos frente a la tragedia humana de quienes caen en la adicción y sufren otros trastornos psíquicos, debido al consumo.
Y no me digan que no es así, yo trabajo con droga-adictos y ex-droga-adictos que -pese a que dejaron ya la droga- continúan con graves problemas psíquicos y no pueden participar en el mercado laboral. Lo que los convierte, de por vida, en receptores de ayuda social.
La entrevista no está por escrito, así que la escucho directamente del Flash y traduzco las principales ideas.
Menciona tres razones: 1) cannabis puede, en el caso de consumo regular e intensivo, provocar danos corporales, psíquicos y sociales; 2) en Alemania, la mayor población que busca ayuda debido a adicción se halla entre los jóvenes que consumen cannabis y 3) tenemos el ejemplo de los coffee shops en Holanda que, frente al grupo de ninos y jóvenes, ha sido muy desfavorable.
Estas tres razones me llevan a concluir que es bueno que tengamos una ley (
Betäubungsmittelgesetz) en Alemania que nos proteja del consumo.
El periodista pregunta cómo se ve la típica "carrera" de un joven adicto. El típico consumente comienza muy temprano, a los 13 ó 14 anos; luego de un ano, tiene un consumo diario de 1 a 2 gramos. No puede rendir en el colegio. Hay cada día más peleas en la casa; se aleja de su grupo de amigos; abandona sus hobbys. Posiblemente, empieza en ese momento el consumo de otras drogas: anfetaminas e incluso cocaína. Y, después de tres anos, los jóvenes llegan donde nosotros o a otros centros a pedir ayuda.
Nunca antes, la población de pacientes en el sistema de ayuda frente a la adicción, tan joven como hoy: desde que atendemos a los pacientes con problemas de adicción al cannabis. Se hayan entre los 20 y 25 anos. Hasta entonces, estábamos acostumbrados a recibir pacientes entre 50 y 60, con problemas de alcohol y entre 30 y 40, con adicción al opio.
Periodista pregunta críticamente: si la ley ha sido incapaz de evitar todo esto, no ha sido un fracaso? Responde: desde el punto de vista médico, el consumo de cannabis es riesgoso; hay que mencionar los trastornos mentales, las psicosis, los trastornos en el desarrollo durante la adolescencia, los trastornos de la motivación, también el mayor riesgo de infartos cardíacos, las enfermedades del sistema respiratorio. Todo esto justifica la conclusión de que estamos frente a una sustancia que no es posible que circule libremente en el mercado.
El periodista cita un estudio de 2010, en The Lancet (?) donde dice que cannabis es menso danino que alcohol y nicotina.
El médico responde que es un estudio del grupo de estudios ??? de los EEUU y que no ha sido poco críticamente recibido por la comunidad científica internacional. Esto es, ha recibido muchas críticas. Porque hay expertos que colocan el potencial de adicción del cannabis mucho más arriba que el de las otras dos sustancias mencionadas.
Naturalmente, frente a la nicotina y de opiáceos tiene cannabis un riesgo de adicción menor; sin embargo, se trata de 10% desarrolla una dependencia; especialmente, quienes se inician muy tempranamente: quienes inician su consumo siendo muy jóvenes. Ya que su memoria de adicción es mucho más afín. Por ello, tenemos que proteger a ninos y jóvenes.
Los coffee shop, en Holanda nos muestran -en comparación europea- que el consumo de cannabis en Holanda comienza especialmente temprano, que el consumo de cannabis entre los jóvenes es especialmente intensivo y aquí, me parece -explica el médico- que la mencionada ley alemana es una ayuda.
Le hacen ver que esta liberalización no tendría vigencia para los jóvenes. El médico responde: sí, esto también se dijo en Holanda. Pero cuando el problema del cannabis exacerbó (creció demasiado) entre los jóvenes, se elevó la edad para entrar a los coffee shop a 18 anos, desde 16 a 18 iniciales. Esto llevó a una disminución del consumo de cannabis, lo que es una prueba de los efectos de una ley.
Por otra parte, si Ud.pregunta a jóvenes holandeses cuán peligroso es el consumo de cannabis y esto, en comparación con otros países europeos, le contestan que ellos lo encuentran totalmente inofensivo. De manera que la ley sí afecta la actitud, la opinión de los jóvenes.
Es correcto que el potencial de peligro de una sustancia sea medida con respecto a los grupos en peligro? Pregunta el periodista. Dice que tiene estudios australianos que muestran la suma de los casos de pérdida del trabajo, los altos costos debidos a la atención médica. Este es un gran peligro en Europa y en otros países industrializados. Los danos por enfermedad llega al 12% de todas faltas laborales se debe al sector alcohol, tabaco otro 12% y las drogas ilegales, llegan al 1 ó 2%. De manera que, si lo consideramos sólo de manera relativa, Ud. tiene razón -reconoce el médico-.
El alcohol es, para la sociedad en general, más peligroso, lo mismo, el tabaco. Desde el punto de vista de la medicina, el tabaco y el alcohol deberían estar reglados por la
Betäubungsmittelgesetz Sin embargo, la sociedad se ha decidido de manera diferente. Advierte que, de aprobarse la liberalización del cannabis, tendríamos una tercera sustancia problema epidemiológica.