domingo, 29 de enero de 2012

No a la inflación

Esta manana en Sonntag Aktuell, de Stuttgart, a propósito de la deuda griega:

No se puede reducir la deuda a un costo de cero. Ni siquiera cuando el dinero procede directamente de la impresora. Siempre son principalmente los ahorrantes quienes la pagan, ya las tasas de interés no alcanzan a compensar la devaluación del dinero. Para no mencionar siquiera la construcción de una pequeña fortuna. La inflación actúa como un impuesto, que no se ha decidido enel parlamento. Y sobre todo, afecta a quienes tratan de ahorrar algo para no vivir después del estado. Esto no es justo; pero, para los políticos es algo práctico.

Sí, es lo que aprendí ya desde el colegio: la inflación de unagran injusticia que afecta especialmente a los más pobres... o más bien que hace pobres y más pobres a todos. En mi país, se le llama "el impuesto a los pobres".

No hay comentarios: