Hoy se cumplen cien años de la fundación de la Biblioteca nacional alemana (
Deutsche Nationalbibliothek), que nació como
Deutsche Bücherei
Fundada por la Asociación de libreros alemanes en Leipzig (
Börsenverein der Deutschen Buchhändler zu Leipzig).
Fue creada, en 1912, por privados y no por el estado. Por libreros, por comerciantes -muchos de ellos, judíos- y en una ciudad típicamente comercial, como Leipzig, no en la capital política, Berlín, ni en el centro de poder de München...
Leipzig era además, en aquel entonces, una ciudad abierta, respetuosa y tolerante, no infectada aún por el enfermizo nacionalismo decimonónico.
Hay que decir también que, durante la II Guerra, la Biblioteca (dominada por los nacional socialistas, ya que pasó a depender del ministerio de propaganda, dirigido por el rhenano Göbbels) logró continuar recibiendo los libros de autores alemanes en el extrenjeros, la mayoría de ellos, contrarios al régimen nacional socialista.
Creo que este es el verdadero espíritu alemán: libre, abierto, respetuoso, tolerante, multifactéctico y dedicado al comercio con todo el mundo, además, culto y un espíritu lector y dialogante... y no la caricatura socializante y nacionalista que se hace de él...
No hay comentarios:
Publicar un comentario