Opel - la negociación

Hace días que quería comentar (traducir) la idea central del editorial del Financial Times - Alemania del lunes.

El gobierno -el editorial habla de la canciller Merkel- fijó (en el sentido de "se casó con") muy tempranamente con una oferente, cuya oferta -según la opinión de todos los expertos y peritajes- es dudosa o problemática (fragwürdig).

Ahora, está sentada en la trampa. (en el sentido de cayó en la trampa y no puede salir).

Su contraparte (Gegenüber), General Motors, tiene, por el contrario, más alternativas.

Así, es. GM dejó todas las puertas abiertas para negociar (supongo que todos conocen los términos BATNA -no hay artículo en Wiki en alemán- y WATNA). Es que los gringos han desarrollado un arte de la negociación muy eficiente, que en Alemania no se conoce.

En Alemania -no sé si en toda Europa- los negociadores se aferran a una posición, descuidando lo que los norteamericanos llaman intereses, eso los convierte en inflexibles -y por tanto- malos negociadores.

Esta es una realidad que veo todos los días y que compruebo en el caso OPEL, al observar la forma de negociar del gobierno alemán. El editorial del diario lo confirma, con otras palabras, claro.

Y eso que, la Merkel, conoce bastante mejor que la mayoría de los políticos alemanes, el arte de negociar; es, a mi modo de ver, una de las razones de su éxito. Pero, en esto, se equivocó.

Entre paréntesis, los mejores artículos críticos acerca de las posibilidades de inversión de Magna, Sberbank, etc. han salido -a mi modo de ver- en el FAZ de los últimos... meses.