El retorno de los lobos

A veces me da la impresión que la gente -en otras latitudes- no cree que el problema demográfico sea tan grave en Europa, esa es la impresión que me queda, por ej., al leer algunos comentarios en mi columna (de este mes, sí, de ahora en adelante, escribiré una vez al mes solamente) de La Segunda.

Es lo mismo que ocurría en Alemania hace apenas algunos años. Se lo trataba de "desprestigiar" como un "asunto ideológico". Por el contrario, hoy, se sabe que no lo es y todas las colectividades políticas se plantean el tema en sus luchas electorales.

La bandera de las llamadas políticas familiares ha sido enarbolada por todos los partidos, desde los extremistas de derecha, hasta los verdes más acérrimos, pasando por los socialdemócratas (gracias Platzeck, que fue el iniciador de esta corriente) y los demócrata cristianos.

La colectividad que menos se ha metido en el tema es la FDP, porque Guido piensa que hay que dejar en libertad de elegir y no "meterse", un planteamiento muy sano, por lo demás. Al discutirse, en el Bundestag, el tema de las salas-cuna y las guarderías, el orador liberal dijo que habría que plantearse la existencia de instituciones privadas para el cuidado de los niños -algo que a mí me parece lo más normal del mundo- a lo que (casi) todo el hemiciclo parlamentario, respondió con risas y burlas. Sí, así estamos.

Recuerdo que los economistas -aún en la época del canciller demócrata cristiano Kohl- advertían acerca de las nefastas consecuencias que tendría este desarrollo y el demócrata cristiano Blüm y otros más, aseguraban que "las pensiones estaban aseguradas", lo que -se ha demostrado- no es efectivo, no están aseguradas, ni podrán estarlo considerando la pirámida demográfica actual... la futura es aún peor.

Me gustaría recordarles este artículo del Newsweek, que tiene un título muy provocativo y que causó cierta inquietud en Alemania, donde fue comentado por la prensa local:

Into the Woods. Economics and declining birthrates are pushing large swaths of Europe back to their primeval state, with wolves taking the place of people

El artículo se queda corto, pues no sólo han llegado los lobos, sino también los lux o luxes, no sé cómo se escribe. René me dice que son los linces! Gracias! E incluso los osos. La verdad es que está muy bien escrito y ¡no se asusten! el inglés es fácil de entender.

Cité el artículo en su momento en mi blog de BlogSpirit El retorno de los lobos