Hace unos días, escuché esta entrevista ("Russland schadet seinen eigenen Interessen" = Rusia perjudica sus propios intereses) con Andreas Schockenhoff (CDU), coordinador de las relaciones ruso-alemanes del gobierno federal.
Destaco la idea final. El periodista (Spengler) le pregunta si Rusia no desea más respeto o sumisión (Unterwürfigkeit). Como marco de fondo, les recuerdo que tenemos el tema del conflicto en el Cáucaso
Schockehoff responde (traducción libre):
Se habla (los rusos hablan) generalmente de estar a la misma altura, Rusia quiere que se la considere nuevamente como una potencia mundial.
Pero también en esto, tenemos que tomar a los rusos de acuerdo a los que ellos mismos desean. Potencia, en el s. 21, no es tener gas, petróleo y tanques, sino que consiste en la capacidad de solucionar conflictos internacionales, la capacidad de aproximarse a los problemas globales de manera constructiva. En este sentido, Rusia se ha perjudicado a sí misma.
Rusia se queja de estar rodeada por la OTAN y por la Unión Europea. (No obstante), en este momento, Rusia persigue un autoaislamiento y perjudica su exigencia de ser considerada como una fuerte potencia (1).
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(1) ... Es ist immer die Rede von Augenhöhe, Russland will wieder als Weltmacht wahrgenommen werden. Aber auch dort müssen wir Russland bei seinem eigenen Anspruch nehmen. Stärke im 21. Jahrhundert ist eben nicht nur Öl, Gas und Panzer, sondern Stärke im 21. Jahrhundert ist die Fähigkeit, internationale Konflikte mit zu beheben, die Lösung globaler Probleme konstruktiv mit anzugehen. In diesem Sinne hat Russland sich selbst geschadet. Russland beklagt die Einkreisung durch die NATO, durch die Europäische Union. Im Moment betreibt Russland eine Selbstisolierung und deshalb schadet es selbst dem Anspruch, als eine starke Macht wahrgenommen zu werden.
Reflexiones sobre una nueva constitución para Chile, por Javier Edwards
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*Recibí este texto por whatsapp. Copio lo que recibí. Supongo que será de
Javier; pero no estoy segura, ni tengo cómo comunicarme con él para
preguntarle....
Hace 4 años
2 comentarios:
Hola, Marta.
Me parece rara la definción que este señor alemán da de gran potencia del siglo XXI. Según eso, Suiza, Suecia y otros países con capacidad mediadora serían grandes potencias, lo que no creo que sea correcto.
Me temo que, como ocurre desde siempre en la Historia, potencia es el país que, en caso de conflicto de intereses, puede imponer la solución que le conviene, total o parcialmente. Esto ocurría con la URSS, se perdió después de la caída del Muro y la política de Putin ha ido encaminada a corregirlo. Me parece lógico que, por su potencia económica y su historia, no se conformen con ser un país de segunda. La triste historia actual de Georgia no es más que el último ejemplo de esto.
querido Fernando, es una conditio sine qua non; no es la única, pero es indispensable.
Suiza y Suecia pienso que tienen más influencia en Europa (al igual que Luxemburgo) que países más grandes y con una economía más grande y más recursos naturales, pero que no demuestra la suficiente... cómo llamarla, civilidad?
No hay que olvidar que del derecho se deriva la fuerza y no la fuerza del derecho :)
saludos Fenrnando y gracias!
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