En marzo de este año, apareció en el FAZ una entrevista con el psiquiatra Norbert Leygraf, quien, desde hace siete años -nos dice el diario- realiza informes periciales sobre sacerdotes católicos, por encargo de la misma Iglesia católica (sí, es bueno no cerrar los ojos ante la cruda, dura y evitable realidad, lo recalco, porque hay quienes claudican ante la pedofilia).
Hay que decir, además, que la entrevista fue reimpresa por el Arzobispado de Colonia y ha sido repartida (gratis, claro) en las iglesias, en un prospecto con abundante información y palabras de nuestro arzobispo Joachim Meisner sobre el tema.
Leygraf dice que, en ese período, ha tratado a siete sacerdotes (¿estará demás decir que también hay otras personas dentro de la Iglesia que no son sacerdotes y también han cometido estas aberraciones? Alberto me dice que, como estoy demasiado cerca del problema y, por eso, no lo veo bien... pienso que lo que ocurre es que yo abro los ojos y no los cierro cuando veo algo que considero que está mal... ver El abusador sexual de mi pueblo).
Cuenta que los informes son escritos por dos psicólogos y por él mismo. Su labor es hacer un pronóstico, no una terapia. Sin embargo, explica que, sí hay posibilidades de realizar una terapia (individual) a sacerdotes.
Explica que, en los casos de pedofilia por parte de sacerdotes, estos se distinguen de los demás miembros de la sociedad en que nunca aplican la violencia corporal. No ha habido ninguna violación de su parte. Los contactos se realizan a través de caricias... etc., etc., aunque lo explica con lujo de detalles, el resto, no lo traduzco, pero se lo imaginan. Agrega que los niños, lo ven como algo horroroso (fürchterlich).
Dice que los sacerdotes intentan bagatelizar... ¿existe esta palabra en castellano? bagatellisieren = minimizar, restar importancia o gravedad; y, además, beschönigen = hacer bonito, paliar, cubrir, cohonestar, disimular... Sostienen que las acciones pedófilas ocurrieron menos veces, fueron menos intensivas a lo que en realidad, fueron.
Me parece que es un poco lo que ocurre en algunos sectores de la sociedad... de parte de aquellos que están tan shockeados que no quieren, no pueden, son incapaces de reconocer lo ocurrido e intentan minimizarlo, restarle importancia...
El psiquiatra y profesor universitario agrega que los sacerdotes tienen un cargo de conciencia más fuerte que el resto. Por una parte, la sexualidad está, para él prohibida -dice Leygraf-. Por otra parte, saben que le hacen a los niños algo horrible.
Sin embargo, seis sacerdotes que llegaron a su consulta debido a que se descubrió que veían pornografía infantil en internet, no tenían cargo de conciencia por ello, ya que sostenían que "las imágenes ya existen" y "hacerles clic no daña a nadie". Explica que ellos nunca se percataron que, detrás de las fotos, hay una acción y que estas acciones son fomentadas por los consumidores del mercado de estas imágenes.
Sobre el celibato, aclara que él no es teólogo moral, sino psiquitra y como tal, puede decir que "los ataques pedófilos no se pueden explicar debido a que esa persona trate de orpimir su sexualidad. La tendencia pedófila se tiene desde la pubertad o no se tiene. Esta tendencia no se puede superar con una terapia (wegtherapieren); sin embargo, se puede lograr que la persona tenga un mejor Umgang (traduzcámoslo como control, aunque no es realmente la voz más precisa) con esta tendencia. Las tendencias pedófilas no son fomentadas por la abstinencia sexual".
Finalmente, dice que "los sacerdotes que viven realmente el celibato no vienen donde nosotros".
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