¡Tras las huellas de Jesús, vamos a ponernos del lado de las víctimas!

Sí, de la víctimas y no de los victimarios...

Queridos amigos, a propósito del tema de los abusos sexuales (sigue siendo un tema muy importante en Alemania), que motivó el comentario de nuestro ministro del Interior y que comenté ayer, me gustaría citar las palabras del obispo de Rottenburg-Stuttgart, Gebhard Fürst, en su prédica del día Domingo de Ramos que es lo que yo pienso que debería guiar la actuación de los cristianos en el tema abusos sexuales de niños en colegios de la iglesia y, en general.

Un amigo me mandó (correo de papel, todavía existe ;) toda la documentación de esta diócesis, que es la que más ha aclarado el tema dentro de su territorio y desde hace años ya.

El link Hinführung zur Leidensgeschichte am Palmsonntag 2010 speziell auf das Thema des sexuellen Mißbrauchs innerhalb und außerhalb der Kirche ein

"Lamentablemente no alcanzo a traducirlo yo misma, de manera que dejo traducir a Google; el título: Introducción de la Pasión de Ramos Domingo, 2010 abordan específicamente el problema del abuso sexual dentro y fuera de la iglesia.

"Si ahora se nos dice la pasión de nuestro Señor Jesucristo, debemos ser conscientes una vez más que Jesús sufrió por el bien de las personas necesitadas. Jesús de Nazaret "se sentó" (es tan fuerte este verbo en alemán, que Google lo traduce así, significa quedarse en un lugar sin querer moverse, defendiendo para siempre a las víctimas) su vida, uno para los débiles, los desfavorecidos, los perdidos de todo tipo, para los enfermos y heridos, las víctimas de los malos actos.

"Las pretensiones de superioridad moral (los llamados Selbstgerechten = los que se creen justos en sí, una especie que existe mucho, lamentablemente) a menudo ha reunido con la indignación y el odio en su contra: el odio contra él, por fin ha traído sufrimiento y muerte. Jesús se ha entregado a la gente. Se ha sacrificado por ella, por su salvación, por sus vidas. Así que se ha dado a los heridos y la pérdida de su vida. Este, su actitud ha llevado a Jesús al sufrimiento y las llevó a la muerte. Jesús fue y es en el lado de las víctimas. Porque él ha estado en el lado de las víctimas, se ha convertido en una víctima de la pena que se le infligió a él por la cruz que se colocó sobre él y que finalmente ha encontrado la muerte.

Termina así: "¡Tras las huellas de Jesús, vamos a ponernos fuertemente del lado de las víctimas!" (In den Spuren Jesu stellen wir uns an die Seite der Opfer!)