El estado, los privados, los frenos y contrapesos, la recaudación y otros temas

Excelente post de Agustín (como todos los suyos), ESTADO, que comienza reconociendo que (las negritas son mías)...:

Cuando vivía en la Argentina estaba generalmente de acuerdo con la idea 'libertaria' según la cual "el Estado es un pésimo administrador". No hay dudas que sigue siendo el caso en el país [ver]. Pero tras ocho años de vida en Holanda dudo del alcance general de esta proposición. Allí uno tiene la sensación —descripta por Montesquieu en el Espíritu de las leyes— que al pagar impuestos uno se paga ... a sí mismo. El Estado holandés no es un deus ex machina instalado por fuerzas malignas para dificultar la vida de los honestos ciudadanos privados. Uno siente que lo dirige un vecino, alguien como uno.

Y luego nos hace dos comentarios que me permito copiar. Lo siento Agustín, quería resumirlos; pero no lo puedo hacer, ni extractar "lo más importante", porque todo es importante. Perdona que, esta vez, copio, en el fondo todo tu post; pero es que es realmente digno de ser divulgado.

A los amables lectores de este blog, les recomiendo mucho leer el blog de Agustín.

1) Privado o estatal, la clave está en los frenos y contrapesos. La distinción-clave no siempre es entre estatal/privado. Hay entidades privadas y semi-públicas manejadas de pésima manera; lo que salta a la vista en estos casos es el mismo problema de los Estados mal manejados: exceso de poder en el 'top'; falta sistemática de instancias de control; bloqueo de la información relevante: Citigroup, Merrill Lynch, Iglesia católica, clubs de fútbol.

2) La recaudación puede ser un criterio de libertad y seguridad. Los países que más recaudan, y cuyo sector informal es minúsculo —los Nórdicos y Holanda— son los más libres y los más seguros. ¿La receta? REPRESENTACIÓN, independencia judicial, libertad de prensa, banco central independiente. Hay países africanos que recaudan menos de 12% del PBI; allí la vida es "solitary, poor, nasty, brutish and short" (Hobbes).