Uds. saben que yo no soy monárquica y considero que no le podemos hacer mayor favor a las cabezas coronadas que dejarlos libres y permitirles hacer una vida como cualquier otra persona.
Pero esta vez, voy a defender a la reina del vecino país, Holanda, cuyo manuscrito del mensaje de Navidad, hemos sabido (gracias al diario holandés de Volkskrant) fue censurado por el ministro pdte. holandés Mark Rutte, para no molestar al nazi Wilders.
Los párrafos de la Reina acerca de la coexistencia con los migrantes fueron grandemente censurados por Rutte, para "no provocar a Wilders por el tema islam". Qué horror, qué falta de valentía o más bien, qué exceso de cobardía.
Wilders es uno de los mayores enemigos de la flia. real holandesa y ya criticó, como un "sin sentido multicultural", el discurso de la Reina Beatrix el 2007, quien llamó a evitar el acoso en contra de los inmigrantes musulmanes y a no levatar muros.
Bien sra. Beatrix! Ojalá hubiera -en este punto- más soberanas como Ud.!
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