Así que el viejito Brüderle (así le llama carinosamente, un amigo) está enojado? Porque, cada vez que hay feriado (especialmente, en Navidad y Semana Santa; pero, en general, todos los fines de semana) sube la bencina y el diesel, o sea, sube el combustible.
A las empresas no se le ha podido probar nada, ningún acuerdo que atente contra la legislación que garantiza la libre competencia... Lo que no quiere decir que no exista algún pacto secreto. Generalmente, los pactos secretos son descubiertos después de varios años y la multa millonaria se la pasan a las grandes empresas... los beneficiarios son los estados y no los contribuyentes, que ya tuvimos que pagar sobre precio por el café, las llaves para el agua y un "cuantohay" de productos que pagamos más caro de lo que habría sido el precio de mercado.
Las empresas de combustible dicen que se debe al problema de Libia y a la catástrofe nuclear en Japón y un gran etcétera. Pero nada de las miles de excusas que siempre proponen explica que el precio suba justo antes de las vacaciones y todos los viernes del año.
Siempre me ha molestado el mal genio y la irascibilidad de los viejitos alemanes, pero esta vez, le digo al ministro Brüderle: me encanta su ira, ojalá que conduzca a alguna parte y no se quede en una simple rabieta.
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