martes, 8 de noviembre de 2011

Nicaragua, el paraíso perdido

A propósito de las elecciones en Nicaragua, este país centroamericano ha vuelto a ser tema periodístico en Alemania. Digo ha vuelto, porque durante la década de 1980, parece que era gran noticia. Recomiendo The Rise of Ortega-ismo de Foreign Policy.

No lo sabía, pero en ese entonces (1979–1990), al menos 15 mil alemanes emigraron a Nicaragua a luchar por la revolución sandinista (según nos informa Das Parlament).

Los alemanes de entonces (han entrevistado a algunos en los medios) fueron a Nicaragua persiguiendo una utopía. Muchos de ellos (los varones) habían sido objetores de conciencia en Alemania, sin embargo, se los veían empunando armas de fuego en Nicaragua. De manera que las autoridades alemanas se preguntaban cómo podía ser eso, si se habían declarado a sí mismos, pacifistas.

Un papel importante jugaba también el tema revolución y cristianismo. No hay que olvidar que el liberacionista Ernesto Cardenal vendía millones de libros y ganaba importantes premios en Alemania. Y que esto atraía no sólo a la izquierda, sino también a los demócrata cristianos alemanes de entonces, con esa fascinación que mostraban por Latam.

En la socialdemocracia, hubo igualmente una cierta polémica, ya que algunos de sus miembros propagaban en y para Nicaragua, la idelogía marxista que ellos -declaración de Godesberg de 1959 - habían  abandonado formal y seriamente.

El complejo anti EEUU también tenía un rol significativo en este amor por la utopía sandinista en Nicaragua.

Demos gracias a Dios porque estas luchas ideológicas ya son historia y porque hoy en día, sabemos que la utopía marxista no condujo -en ninguna parte del mundo y en ninguna de sus vertientes- a nada bueno...

1 comentario:

Phoebe dijo...

Comparto tu opinión...el marxismo nunca fue positivo pues desune
fratricidamente a una nación. Lleva consigo la guerra civil que los marxistas llaman "lucha de clases".