Nunca había escuchado a un político alemán decir "es tut mir leid", es positivo escucharlo de él. Evidentemente que la institucionalidad no resistiría una segunda renuncia de un pdte. federal... Ni la política resistiría otra renuncia (después de tantos que han tirado la toalla) más, la última -de Lindner- tiene una sola semana de antigüedad.
A mí me queda claro que cualquier político -o toda persona- que se deja enceguecer por el glamour del dinero y la riqueza... y abandona la solidez, comete un gran error.
Agua Maldita
-
Cuenta la leyenda que el monarca Abdul-El-Agreb adoraba el agua. Su
fastuoso palacio, construido en varios niveles, estaba rodeado de estanques
y fuente...
Hace 3 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario