Antes que nada, felicitaciones a los queridos lectores españoles de este blog (28% del total de visitas) por la victoria de ayer. ¡Bien! Lamentablemente, no pude ver el partido, pero me alegré ayer y me alegro hoy. ¡Felicitaciones y adelante!
Hoy me quería referir brevemente al fallo tantas veces citado en estos días, del Landgericht de Frankfurt, en que se establece qué se puede hacer y qué no se puede hacer durante estos días, para celebrar, en el propio jardín.
Sí, el derecho de propiedad es "sagrado", pero no absoluto. Lógico. Además con Kant, en Alemania pensamos que "nos debemos comportar frente a los demás como queremos que ellos se comporten frente a nosotros", al menos... en teoría...
Me refiero a la sentencia del fallo de 6 de marzo de 1989. Bajarlo, cuesta 1 euro... Mejor yo les cuento lo que dice:
Se puede organizar una fiesta en el jardín (o en el balcón). En el jardín, se puede invitar hasta 50 personas al jardín (evidentemente si cabe este número de sustancias individuales de naturaleza racional, para citar a Boecio... no puedo creer, realmente no lo puedo creer: Boecio tiene artículo en todos los idiomas imaginables ¡¡¡menos en español!!!).
Se puede instalar un televisor en el jardín para ver el partido. Pero éste debe ser apagado a las 22 hrs. Ni un segundo más tarde.
Hasta las 10 P.M., se puede gritar de júbilo; pero sólo hasta 50 decibeles. Se dice que 50 decibeles equivale al ruido de la lluvia y de un refrigerador (creo que en España, le dicen "el frigo", pero no estoy segura).
Pero después de las 22, sólo se puede celebrar hasta 35 decibeles, que equivale a música muy suave (30 = susurrar bajito; 40 = ruido de una oficina).
Y, como se imaginan, no está permitido mantener el televisor (encendido, claro) en el jardín después de las 10 de la noche. Supongo -es super lógico- aunque el fallo no dice nada que esto se aplica por analogía a los beamer -que el 89 eran aún demasiado caros para los particulares).
Bueno amigos que viven el Alemania, ya saben lo que pueden hacer y lo que no pueden hacer durante esta Copa.
Y no lo olviden: después de las 10 tienen que entrar el televisor a la casa, cerrar puertas y ventanas y advertir a los invitados (a los 50) que tienen que conversar de manera de no superar los 35 decibeles. De otra manera, probablemente tendrán a la policía en la puerta de la casa...
2 comentarios:
sniff, sniff, como no ponen estas reglas en mi país, mis odiosos vecinos ya tendrían a la policía en casa!!!
snif, snif.
saludos. Hilda
Pues esta ley no me la sabía yo! Y que conste que el domingo lo celebramos en el jardín de un alemán y la cosa duró hasta las 12! Supongo que si no vino la policía es porque mi amigo mantiene buenas relaciones con sus vecinos, y ninguno quiso fastidiarle la fiesta.
Gracias por tus artículos!
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