Un conocido mío (como se dice en Alemania) fue protagonista, más bien protagonizó activamente este suceso ocurrido -dice el diario- la semana pasada. Supongo que fue el fin de semana: „Ein Zeichen gesetzt“ = marcar / establecer una señal.
Resulta que en el pueblo donde vive su familia desde el 816 (no, no se me olvidó un 1, leyeron bien, sobre todo los americanos: hablo del s. 9), la NPD (extrema derecha, con todo lo que eso, en Alemania, significa) organizó un encuentro "privado", en un local viñatero de Wallhausen.
Dice que eran unas 50 personas de este "partido". Michael Salm-Salm, el alcalde del pueblo y el hijo del primero protestaron contra el evento nazi. Los NPDs entraron al local y ellos se quedaron afuera. MSS y su hijo intentaron entrar pero los NPDs no los dejaron.
El dueño del local intervino y los dejó entrar, al príncipe y a uno de sus hijos. Después de todo... se trata del príncipe... que de algo nos sirva la Adelsfrommigkeit (este tirarse al suelo cada vez que ven una "cabeza coronada" ;)
Ambos cuentan que observaron, hasta que Voigt (el jefe de la NPD en Alemania) dijo que la República federal de Alemania era una mala construcción y que deberíamos volver al Deutsches Reich. Entonces -cuenta nuestro protagonista- eso ya le pareció demasiado y trató de hablar al público, armándose un gritería (traducción textual de Schreierei).
No se puede mirar siempre a otra parte cuando pasa algo. Algo malo. Le mandaré un mail inmediatamente felicitándolo y agradeciéndole su valor. Ojalá hubiera más gente como él. Me gustaría haber estado ahí.
1 comentario:
No se puede siempre a otra parte cuando pasa algo malo. Por supuesto!! no debe hacerse.
Que bueno que haya gente así. Saludos. Hilda
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