Queridos amigos: recordarán esta controvertida escena... que sirvió para bajar todos los índices de simpatía que Bush pudiera haber tenido en Alemania alguna vez, ya de por sí muy bajos.
Pues bien -y con esto retomo la traducción de la entrevista a Otto Graf Lambsdorff (ver Lambsdorff: Una crisis provocada por el sobreendeudamiento no puede ser combatida endendáudose aún más; pero -me perdonarán Hugo y rigo pero hoy abandonamos las preguntas económicas de la entrevista que dejamos para mañana).
Le comentan a don Otto, que, durante el viaje de la semana pasada (viernes-sábado) a los EEUU, Merkel no puede temer a que dos manos se desplacen por sus hombros y le hagan un masaje... el masaje en la espalda pertenece a un estilo político que no es el de Obama. Ambos -Merkel y Obama- tienen personalidades analíticas.
Lambsdorff contesta: también lo creo así. Y no hay nada de que criticar (+- anwenden), por el contrario. Pero es importante saber que ninguno de ellos es una cabeza coronada que pueda dejar libre su preferencia o animadversión (+-Abneigung). Ambos son representantes elegidos por sus naciones y tienen la obligación de entenderse (+- mit einander auskommen).
El periodista le pregunta, un poco más adelante: entonces, estadistas no son amigos/as, sino representantes de intereses (de sus países, claro).
El ilustre liberal alemán responde: pueden ser amigos; pero, en esencia, son representantes de intereses. De Gaulle dijo una vez "estados no tienen amigos, estados tienen intereses". No es lo único que vale, también hay que tener amigos. Pero no es la condición para poder trabajar bien conjuntamente.
Como en este momento, cambia levemente de tema y empalma con otro tópico que me parece importante, lo dejo hasta aquí.
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