Hoy en la manana, el recurrente tema de la inmigración a Alemania, volvió a hacer noticia. Timo Baas, director del Institut für Arbeitsmarkt und Berufsforschung = Instituto de estudios del mercado laboral y ocupacional, esto es, del hermoso mundo del trabajo, concedió una entrevista publicada en el diario "Freie Presse" de la ciudad de Chemnitz (que durante algunas décadas sufrió un cambio de nombre y se llamó "ciudad de Karl Marx"...).
En resumen, Baas hace ver que, lamentablemente, el número de trabajadores procedentes de los nuevos estados miembros de la UE a Alemania es inferior a la cifra que se esperaba.
Explica que alrededor de 10 mil trabajadores inmigraron a Alemania, en los primeros meses después de la entrada en vigor de la legislación que permite la libre circulación de trabajadores desde Europa central y oriental. Es una cifra levemente inferior a la esperada.
Su Instituto calculaba que, durante el 2011, inmigrarían aprox. 100.000 trabajadores procedentes de estos países. Otras instituciones fueron incluso más generosas, como el Institut der Deutschen Wirtschaft, en Colonia, que pronosticaba el ingreso de cerca de 370.000 personas del Este y Oriente del Continente, al mercado laboral alemán.
Por qué este escaso interés de los trabajadores del Este en venir a Alemania? Baas explica que, en países como Gran Bretana, Irlanda y Suecia, la legislación que permitía la libre circulación de trabajadores, entró en vigor inmediatamente el 2004, mucho antes que en Alemania.
"En aquel entonces, la política alemana desperdició una gran oportunidad para contrarrestar la escasez de personal calificado. La campaña electoral de ese ano, jugó un papel importante, como el hecho de que Alemania tenía, en ese momento, alrededor de cinco millones de desempleados".
No hay comentarios:
Publicar un comentario