La muerte del pdte. polaco nos conmovió a todos ayer al mediodía. Tal como los miles de polacos, también rezamos un responso por su alma, la de su sra. y de sus muchos acompañantes (ayer no se sabía a ciencia cierta quiénes eran, parece que no se sabía si todos los que debían abordar el avión, efectivamente lo habían hecho).
Indudablemente, Kaczyński no era santo de la devoción de muchos, tampoco de la mía (por su nacionalismo); pero... no se puede negar que con su conducta de niño taimado, logró (inconscientemente) que a Polonia se le diera la importancia que se le merece dentro del concierto europeo y mundial. Rusia, por ej., captó que no puede "entenderse" con la UE dejando de lado -o pasando a llevar, tema de la carne, por ej.,- a Polonia.
De alguna manera la diplomacia de Tusk y Sikorski -su política internacional educada y sin exabruptos- que ha llevado al acercamiento con Rusia, cuyo zénit tuvo lugar esta semana (ver 70 años después de la masacre de Katyn - Rusos y polacos) fue preparada por el comportamiento de los hermanos Kaczyński.
Si Lech Kaczyński hubiera terminado su período presidencial de manera normal, sin morir en un accidente como el de ayer, no sería enaltecido como un héroe nacional -algo de lo que los nacionalistas polacos nunca tendrán suficiente-, no se crearía en torno a él, esa áurea mística que ahora lo rodeará.
Máxime cuando, los conspiranoicos de siempre -en el comportamiento absolutamente irracional que les es propio- buscan culpables y paralelos histórico-providenciales: "el accidente no habría sido un accidente, sino que la mano oscura de los servicios secretos rusos estaría detrás".
Lech Wałęsa dijo ayer que, una vez más (como en Katyn), la elite polaca había sido eliminada... PLOP! No creo que la elite polaca puede llenar un Tupolev.
A mí me gustaría saber de quién es la frase que circulaba ayer en internet: "Polonia es Cristo entre las naciones", PLOP!
El avión Tupolev "había sido construido en Rusia, en junio de 1990", según nos informa Gazeta Wyborcza, en su artículo Ostatni lot tupolewa numer 101 = El último vuelo de Tupolev número 101, que es el artículo más completo que encontré ayer sobre el tema. Esto es, el avión era aún de la época soviética!!! O sea que a los años que tenía, habría que agregarle por lo menos, 20 ó 30 más, al menos, ya que la teconología soviética al momento de la desmembración del Imperio (diciembre del '91, oficialmente) tenía varias décadas de atraso en relación a los países occidentales.
No sé si saben que en Smolensk había una tupida niebla y que el aeródromo de esa localidad del Noroeste de Rusia, en la frontera con Bielorrusia, no cuenta con los instrumentos para hacer aterrizar un avión "a ciegas", o sea, por instrumentos, hay que aterrizar "por visión", o sea, mirando la pista; de manera que la seguridad del aire rusa -y, sobre todo, la bielorrusa, que es el país que sobrevoló casi todo el tiempo el avión- ordenó al avión presidencial aterrizar en Minsk o en Moscú, desde donde los invitados podrían dirigirse en auto o en tren hacia Katyn (la mayor parte de los polacos que participarían en el acto, habían viajado por tren).
Dos horas antes, un avión ruso había tratado de aterrizar en Smolensk, sin lograrlo, había regresado a Moscú. Smolensk NO es un aeropuerto apto para la aviación civil, se dice.
El piloto se negó o fue obligado a negarse... e intentó -sin éxito- tres veces, aterrizar en Smolensk. El cuarto intento fue fatal, rozó los árboles y... ya saben lo que pasó.
Ayer, un amigo me contaba que "hay que recalcar que Kaczynki obligó al piloto a hacer el aterrizaje...", me decía que a él se lo habían contado, independientemente una del otro, un "importante inversionista con vinculos en el gobierno polaco"(=> hombre bien informado) y una amiga suya checa (la prensa checa está muy bien informada sobre Polonia).
Seguí la pista a la noticia y llegué al artículo mencionado más arriba, de Gazeta, de donde copio... algunos párrafos donde esto que mi amigo asevera, se insinúa, basado en la actuación pasada del Pdte. en estos vuelos. El que la Fuerza Aérea polaca no diga nada, en curcunstancias de que la versión oficial dice que estamos frente a "un error del piloto" se debe, indudablemente, al duelo y a la contrversia entre esa institución armada y el Pdte. (ver más abajo):
Se sabe que en agosto de 2008, el Estado Mayor Presidencial voló a Azerbaiyán, durante el vuelo, el presidente pidió al capitán que aterrizara en Tiflis. A lo que el capitán Gregory Pietruczuk, se negó, igualmente por seguridad, cambió el plan de vuelo y no aterrizó en Tiflis (fue unos días después del estallido del conflicto entre Georgia y Rusia), sino en Azerbaiyán (desde donde, Kaczyński tuvo que seguir en auto a la capital georgia, con lo incómodo que debe ser ese viaje, nota del blog).
Sí, el piloto, después de consultar por radio con su comandante, se negó a obedecer al Pdte. Kaczyński, explicando que las consideraciones de seguridad impedían el aterrizaje que el Pdte. ordenaba. Kaczyński fue a ala cabina, trató de convencer al piloto de que cambiara su decisión. Lo que no hizo, gracias a Dios. Kaczyński dijo a los periodistas a bordo: "Si alguien opta por ser un oficial, no debe tener miedo".
Finalmente el avión aterrizó como había decidido el piloto, en Azerbaiyán.
Más tarde, el capitán Pietruczuk fue galardonado con la medalla de plata por su contribución a la defensa nacional por el Jefe de Defensa Bogdan Klich por "el cumplimiento del debido proceso y un sentido de la responsabilidad por la seguridad de los cuatro presidentes a bordo (además de Lech Kaczynski, se hallaban en el avión fueron los presidentes de Estonia, Letonia y Lituania). De conformidad con los procedimientos de las decisiones finales, el capitán es, en el despegue y el aterrizaje es siempre el amo.
La controversia continuó y en octubre de 2008, cuando el Presidente y el Primer Ministro deberían volar a la cumbre de la UE en Bruselas, la enfermedad de los dos pilotos, impedió la salida de dos aviones.